En este artículo voy a describir como he cambiado el líquido refrigerante de una Ducati ST4s. La botella de 5 litros cuesta entre 10 y 15 euros, dependiendo de la marca. Aunque solo se necesitan 3.5 litros.
Ducati recomienda que el líquido lleve una concentración del 50% de pureza. Esto evita la congelación del líquido hasta -37ºC.
También es recomendable cambiarlo cada 2 años o 20000 Km, no tanto porque pierda propiedades de refrigeración o anticongelación, sino porque los aditivos que evitan la corrosión del circuito de refrigeración, pierden sus propiedades.
Para hacer el cambio hay que desmontar los 2 laterales del carenado y esto implica desmontar los espejos y el frontal. La verdad es que la ST no tiene muy buena accesibilidad. El motor debe estar frío. El termostato debe tener un pequeño agujero o estar mínimamente abierto con el motor frío, por eso se puede vaciar todo el circuito. Además, así siempre circula una pequeña cantidad de líquido, y cuando se abre completamente, el enfriamiento del motor no es tan brusco
En el lado derecho, arriba, cerca de la barra de horquilla está el vaso de expansión, que se conecta con un manguito al radiador de agua. Cerca de donde se conecta, está el tapón de llenado del radiador. Cuidado con abrir este tapón, porque hará que se vacíe el depósito de expansión.
Coge un recipiente vacío (una lata abierta por la mitad) y desconecta el depósito de expansión del radiador después de aflojar la abrazadera. Al abrir el tapón del depósito, el líquido saldrá con más velocidad.
Después se afloja el tapón de vaciado que tiene la bomba de agua en el costado izquierdo (rodeado con un círculo rojo en la foto).
Procura recoger el líquido en el mismo recipiente de antes. Al abrir el tapón del radiador, el líquido saldrá con más velocidad. Incluso, para vaciar totalmente el circuito, se puede soltar uno de los manguitos que van a la bomba (el inferior) e inclinar la moto hacia la izquierda.
A la hora de volver a poner el tornillo de vaciado, usa una junta de cobre nueva para evitar fugas.
Una vez colocado el tornillo de vaciado, empieza a rellenar el radiador con el refrigerante. Deberás ir poco a poco ya que la boca de llenado es pequeña.
Cuando veas que se ha llenado, aplasta varias veces los tubos del circuito para que se mueva el líquido y puedas expulsar el aire que todavía queda.
Este último paso lo tendrás que repetir varias veces hasta que veas que no salen burbujas. La boca de llenado está más alta que el nivel superior del cilindro trasero y entonces podrá salir todo el aire. Según vas rellenando, el radiador llega a desbordarse, pero baja el nivel al ocupar el sitio del aire que tiene el cilindro trasero.
Con el radiador lleno, ponle el tapón y conéctalo al vaso de expansión. Rellena el vaso de expansión hasta el nivel correcto (entre las 2 marcas) y arranca el motor para que el circuito coja presión. En unos 10 minutos debería haber alcanzado 110ºC y ya se puede parar el motor.
Al hacer circular el refrigerante, puede mover el resto de las burbujas y conseguir que baje el nivel. Una vez el motor esté frío, comprobar de nuevo el nivel del vaso de expansión y rellenar si es necesario.
Igual te quedan dudas de si se habrá ido todo el aire del cilindro trasero. Puedes mover la moto hacia los costados o balancearla de delante a detrás sujetándola con el freno delantero.
